Ya se está acercando la festividad de Todos los Santos y en Cataluña es típico celebrarlo con los tradicionales Panellets o Miguetes, como se conocen en tierras leridanas.
Este dulce es por tanto de temporada aunque sí se pueden encontrar a lo largo del año en establecimientos muy turíticos. Además, esta tradición está muy ligada también a la agricultura por la recolección de las castañas y de otros frutos secos como las avellanas o las almendras.
Los Panellets son “panecillos de mazapán” que están recubiertos de piñones o de almendras, aunque con el paso del tiempo ha ido dando lugar a diferentes recetas en la actualidad podemos encontrar diversos sabores.
Tanto la festividad de Todos los Santos como la recolección de las castañas han sido dos acontecimientos que han marcado el consumo de este dulce típico desde el siglo XVIII.
La tradición de los Panellets se relaciona con antiguos cultos funerarios en los que se elaboraba y llevaba comida a las tumbas de los difuntos. Estos dulces han pasado de prepararse por los payeses de forma artesanal aprovechando los frutos secos que habían recolectado y que habían sido bendecidos por la iglesia a convertirse en un premio que se rifaban en las ferias.
Es por esto que cada año cuando iban los agricultores y pasteleros a vender por las ferias sus castañas, mostraban las figuras complicadas que hacían con los Panellets. Y en el año 1796 estos dulces empezaron a rifarse junto a los pollos entre todos los asistentes a la feria de Barcelona y poco a poco se fue extendiendo a otras poblaciones cercanas. Para participar en la rifa había que jugar a las cartas y el premio era o un pollo o un plato de Panellets. Por eso durante la mitad del siglo pasado la gente adquirió el hábito de conseguirlos con las rifas y raramente los compraban.
También era una tradición ir visitando los Cafés más importantes de Barcelona porque preparaban mesas muy bien iluminadas y adornadas con flores en las que se exponían los dulces. Y fue sólo cuando se crearon los primeras pastelerías en 1900 que se convirtieron en un artículo de compra-venta. Además las pastelerías empezaron a anunciarse con grandes carteles y de esta forma hacían la competencia a los cafetines.
Vamos que era un reclamo para que la gente cuando saliese de misa recorriesen los cafés, hicieran alguna parada en la rifa y los compraran para el postre de la cena.
La tradición es tomar los Panellets como postre en la cena del 31 de octubre y se acompañan de castañas asadas o crudas y de un poco de vino blanco o dulce, especialmente Moscatel o Malvasía. Así que ya podéis imaginar que más de una tertulia se puede alargar durante la noche 🙂
Los auténticos Panellets están hechos a base de claras de huevo, azúcar y almendra seca, pelada y granulada, por este motivo se encarece mucho su elboración y algunos comercios usan espesantes naturales como pueden ser la patata o el boniato, aunque por supuesto hay gente que le gusta más este tipo de elaboración.
Como he dicho antes los sabores han ido aumentándose a lo largo de la historia y para diferenciarlos suelen tener cada uno una forma diferentes. Por ejemplo, los de piñones, que son los más caros, son redondos; los de almendra rectangulares o con forma de croqueta; los de limón tienen un pequeño triángulo en la parte superior; los de café tienen una hendidura que nos recuerda a la forma del grano, etc.
La popularidad de estos dulces se ha ido extendiendo y, en la actualidad, es posible encontrarlos en otras Comunidades Autónomas, como Madrid o Asturias, para celebrar con Panellets el día de Todos los Santos.
- Postres Originales | Panellets Tradicionales. Receta
- Postres Originales | Panellets Variados. Receta
Hola!!, que entrada más bonita, yo ya tengo ganas de comer panellets, para todos los Santos, en mi casa no faltan, ni las castañas, ni los boniatos, es la tradición, y que buenos son! ya los tenemos aqui!
besos
Silvia
Holaaaa, es verdad lo que te ha dicho Silvia, una entrada preciosa!! Me encanta de tu blog que siempre aprendemos algo!! Un besote!!