Últimamente en Chile han aumentado las denuncias con respecto a la miel adulterada. Por eso, me ha parecido interesante ampliar la sección de Consejos y Trucos para que conozcas cuál es su proceso para saber si la miel pura que nos venden en muchos establecimientos ha sido adulterada. Pero tranquilo aunque la adulteración existe, no debemos ser alarmistas y poner en duda cualquier miel que encontramos. Y espero que te animes a consumirla para preparar muchos postres como por ejemplo estas nueces caramelizadas o estas berenjenas en tempura.
El proceso de fabricación es muy sencillo, las abejas recogen el néctar de las flores para transformarlo posteriormente en miel dentro de los panales donde almacenan todo el producto. Cuando en ese radio hay una gran predominancia de una planta determinada, se dice que la miel es monofloral de esa planta y si no hay una dominante se dice que es multifloral.
Después cuando se empieza a cosechar la miel se lleva a la sala de proceso, y comienza el proceso de los que venden miel pura y los que tratan de producir más miel adulterándola, Para ello, le agregan agua, glucosa, sacarosa o jarabe de fructosa y de este modo venden mayor cantidad a menor precio.
Diferencias entre la miel pura y la miel pasteurizada
La miel pura es el producto de las abejas sin purificar, ni calentar, y sin añadir nada, es decir, es recolectada de la colmena y envasada, sin ningún otro proceso que la altere de algún modo. Unos 30 gramos de miel pura contienen aproximadamente 20 tipos de vitaminas, 18 tipos de aminoácidos, 16 minerales, y una importante cantidad de antioxidantes y fitonutrientes. La miel pura es antiséptica, edulcorante, tonificante, calmante, laxante y diurética. Además, tiene propiedades curativas y es un excelente energizante.
En cambio, la miel pasteurizada se calienta a 65-80 grados celsius y esta temperatura destruye algunos de estos micronutrientes, convirtiendo a la miel refinada en un producto no apto para usos terapéuticos. Cambia su textura, su color, su sabor, adquiriendo un sabor a cocido a causa de la caramelización.
Trucos para reconocer la miel adulterada
1. La miel pura se cristaliza con el tiempo
Todas las mieles son líquidas pero, con el tiendo tienden a solidificarse. Por eso, en el caso que compres un frasco de miel que ya está cristalizada se trata de miel pura. Pero si compras un frasco de miel líquida puedes esperar unos días para que solidifique o bien colocarla en la nevera. En el caso que no se cristalice cuando la mantengas en la nevera, posiblemente, no es una miel pura.
2. Contraste de color
Un truco es si tienes en casa yodo pon unas gotas en un vaso de agua y luego añade un poco de miel en ella. Si la mezcla queda de color azul, entonces está mezclada con harina o almidón de maíz y querrá decir que está adulterada.
3. Prueba de calor
Otra prueba fácil de hacer en casa es encender un fósforo y quemar un poco de miel, si se enciende quiere decir que es pura porque si contiene agua impedirá que arde.
4. Observar la espuma
Mezcla un poco de miel con agua y agrega unas cuatro o cinco gotas de vinagre. Si observas que sale espuma, significa que la miel ha sido adulterada con yeso.
5. Disolverla en agua
Añade una cucharada de miel en un vaso de agua. Si la miel se disuelve en agua, significa que es una miel falsa o de mala calidad. La miel pura no se disuelve en agua. La miel pura debe quedarse toda junta, como un sólido, cuando se sumerge en agua.
6. Prueba de la gravedad
Con una cuchara toma una porción de miel y colócala bocabajo. Si se queda en al cuchara o cae muy lentamente quiere decir que está madura y por tanto es de buena calidad, en cambio las mieles que están muy húmedas caerán rápidamente.
7. Sumergir el pan
Y aunque te parezca extraño este truco también te será de utilidad para saber si tu miel es pura. Para ello sumerge un trozo de pan viejo y duro en miel, si al cabo de unos 10 minutos el pan continúa endurecido, verificarás que es pura. En el caso que tenga mucha agua el pan se ablandará.
8. Leer y entender la etiqueta
Lo más sencillo es primero comprobar que se llama “miel” porque en el caso que lleve cualquier otro componente añadido ya no puede etiquetarse con ese nombre.
Pero también, si estás en el supermercado al leer los ingredientes debes comprobar si la miel contiene jarabe de maíz con fructuosa o glucosa comercial. Si es así, no la compres porque estos son dos aditivos utilizados frecuentemente para impedir que esta se solidifique.
9. Comprar miel a un apicultor de la zona
Generalmente esta miel será más fresca y habrá sido menos manipulada para envasarla. Pero, ten en cuenta que esta miel puede cristalizar más fácilmente cuando bajen las temperaturas. Esto se debe porque la miel es una solución sobresaturada en azúcares y al bajar las temperaturas (a unos 12ºC de día y unos 4ºC de noche), disminuye la solubilidad de estos en la poca agua que lleva (alrededor del 18%), y se forman cristales sólidos.
10. Comprar miel de una marca de garantía
Si no puedes comprar miel pura directamente de un apicultor, te recomiendo que compres una marca de garantía. Puesto que para poner su miel en el mercado habrán realizado una serie de manejos, que garantizarán con su marca el cumplimiento estricto de las normas legales del producto.
Advertencias
Así que espero que con estos sencillos trucos puedas comprobar la calidad de la miel que compras y así podrás elegir la más pura, todo con el fin de aprovechar al máximo los beneficios de incluirla en tu alimentación.
¿Tu eres comprador habitual de miel?
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