¿Cómo descubrí esta receta?
Hoy comienza la 4ª temporada del reto Color y Sabor así que espero que cada mes sigamos descubriendo nuevos ingredientes para realizar platos de todo tipo, este mes yo me he animado con este Jengibre Confitado que es mucho más difícil de encontrar que en fresco y si lo encuentras suele ser demasiado caro.
Así que te animo a que prepares el Jengibre Confitado para irlo agregando a tus postres como helados, bizcochos o galletas porque además se conserva muy bien en un tarro hermético a temperatura ambiente, aproximadamente unos cuatro meses, aunque estos caramelos también los puedes disfrutar solos o acompañados de un trocito de chocolate negro. ¡Ah! Y en el caso que te haya sobrado almíbar, no lo tires porque puede servirte para para endulzar y aromatizar tus infusiones.
Pero, si nunca has probado el jengibre seguro que te sorprenderá su sabor ligeramente picante, pero poco a poco te irás haciendo a su toque especial y podrás beneficiarte de sus maravillosas propiedades. Por si no lo sabes el jengibre es una planta que lleva utilizándose más de 5000 años como medicina tradicional en China y en la India. Esto es debido a que se trata de un anti inflamatorio natural que nos ayuda a combatir enfermedades respiratorias, así como artrosis y problemas digestivos. Además, es rico en aceites esenciales, vitaminas, minerales, antioxidantes y aminoácidos los cuales tienen efectos beneficiosos para aliviar el malestar gástrico, mejorar dolores menstruales, migrañas, tienen efectos que son beneficiosos para prevenir el cáncer de colon
Las única contraindicación que genera su consumo es la elevación de la temperatura corporal, por lo que no se recomienda a pacientes con fiebre. Así que si quieres gozar estos beneficios no dudes incluir el jengibre en tu dieta.
Ya sabes que si tienes alguna duda para hacer esta receta, me lo puedes decir en los comentarios y te contestaré lo más rápido posible. Y si te ha gustado la receta compártela en tus redes sociales.
Vídeo Jengibre Confitado – Paso a Paso
- 140 gramos de Jengibre pelado
- El Agua necesaria para cubrir el jengibre
- 250 gramos de Azúcar
- 300 gramos de Agua
- Primero pelamos el jengibre y lo cortamos en rodajas finas, horizontales o verticales, aunque también se puede hacer jengibre confitado en bastoncitos, en dados pequeños o con la forma que se quiera obtener.
- Después ponemos el jengibre en un cazo, lo cubrimos con agua y lo llevamos a ebullición. Una vez que haya hervido lo dejamos cocer a fuego lento durante una hora aproximadamente, hasta que el jengibre esté bien tierno.
- A continuación, escurrimos el jengibre y empezamos a preparar el almíbar poniendo a fuego el azúcar y el agua, cuando el azúcar se haya disuelto incorpora el jengibre y deja cocer a fuego lento durante una hora con la cazuela casi tapada, dejando la tapa ligeramente desplazada.
- Pasada esa hora, retiramos la tapa y continuamos cociendo durante una hora u hora y media, hasta que el almíbar que casi se haya secado el almíbar.
- Retiramos el jengibre posándolo bien extendido sobre papel vegetal y lo dejamos enfriar. En el caso que al pasarlo el azúcar se cristalice como me ocurrió a mí procura romperlo lo antes posible o también puedes ponerlo en una bolsa y sacudirlo.
- De forma opcional puedes rebozar el jengibre con azúcar y dejarlo secar destapado como estaba, es decir, bien extendido.
- Puedes conservar el jengibre confitado en un tarro de cristal cerrado a temperatura ambiente y gracias al azúcar puedes conservarse hasta cuatro meses.
- Azúcar: Si lo quieres aún más dulce puedes poner hasta 350 gramos.
Hola Pilar, una receta muy fácil y útil porque puede usarse en muchas preparaciones. Además de los beneficios que mencionas, también es muy bueno para cuando dan náuseas, comerse un trocito de este este confitado ayuda a aliviarlas.
Besitos!
Muy buena receta, se puede emplear en múltiples elaboraciones, además el jengibre es un excelente remedio para curar el empacho porque estimula los jugos digestivos y el flujo de enzimas que ayudan a digerir los alimentos.
Besos gordos!!
Qué receta tan chula… no sabía que el jengibre elevaba la temperatura. ¿Ves? Todos los días se aprende algo nuevo. Muchas gracias,
Qué curioso! No lo he probado nunca pero tendré que hacerlo! Un besazo
Qué buenos!! me comería uno tras otro… 🙂
No los hemos hecho exactamente igual però hemos coincidido en receta!
Que rico, verdad?
Ptnts
Glòria